SOCIEDAD. CHACABUCO. Patovicas de un pub acusados de agredir brutalmente a joven de 24 años

Un joven de 24 años denunció que la madrugada de ayer, dos patovicas de un pub ubicado en Hipólito Yrigoyen y 14 de Julio lo agredieron a patadas. Además de lesiones en el rostro, los golpes le produjeron un corte en el pabellón del oído izquierdo. Estuvo internado en el hospital municipal hasta el mediodía de ayer.
Los agresores están identificados.
Luis Cascio, tal el nombre del denunciante, estaba celebrando, al igual que otros habitantes de Chacabuco, el día del amigo.
De acuerdo a Cascio, todo ocurrió cerca de las 4:30hs de ayer, afuera del pub “90 grados”.
El muchacho comentó que se encontraba dentro del local y se asomó a la puerta porque no podía encontrar a los amigos con los que había salido.
Cuando intentó volver a entrar, dos personas, que según Cascio son los porteros del local nocturno, no lo quisieron dejar entrar.
Según la declaración del herido, los patovicas lo empujaron, haciéndolo caer sobre la vereda.
Ya en el piso, comenzaron a darle patadas, en la zona de la cabeza.
Los familiares de Cascio, comentaron que otros jóvenes que se encontraban afuera del pub, le pidieron a los agresores que se detuvieran.
En el medio de la golpiza, Cascio perdió el teléfono celular, que sostenía en una de sus manos.
Los amigos del herido, fueron los que se encargaron de trasladar a Cascio hasta el nosocomio local.
Cascio sufrió lesiones en el rostro, el pecho, y un corte en la oreja izquierda, que debió ser suturado en el hospital municipal “Nuestra Señora del Carmen”.
El muchacho fue internado en observación hasta el mediodía de ayer. Antes de darle el alta, los médicos le recetaron medicamentos y reposo.
La noche de ayer, en compañía de sus familiares, Cascio radicó la denuncia en la comisaría local. Los agresores ya fueron identificados.
Con credencial y capacitación. De acuerdo a la ley nacional que regula la actividad del personal de control, admisión y permanencia de locales, los denominados “patovicas”, deben exhibir una credencial en el que conste el número de inscripción en un registro nacional.
Para poder integrar este registro el postulante debe cumplir con un curso de capacitación de tres años con materias sobre derechos humanos y certificar su aptitud psicológica para desarrollar el trabajo. El proyecto se elaboró luego de que en el 2006 un joven falleciera a raíz de los golpes que recibió de patovicas. (Fuente: El Urbano)